
En esta receta elaboramos croquetas de butifarrón caseras, un aperitivo que combina un exterior crujiente con un interior suave y cremoso, lleno del auténtico sabor del butifarrón mallorquín. Estas croquetas destacan por su masa equilibrada, que mantiene el relleno jugoso y fácil de moldear, ideal para preparar unas 30 unidades. Su sabor intenso y auténtico las convierte en una opción perfecta para reuniones familiares, celebraciones, picoteos o simplemente para disfrutar de un bocado delicioso.
Es una receta versátil que se puede preparar con antelación y congelar, facilitando así la organización de cualquier comida o evento. La preparación de estas croquetas caseras requiere cuidar la masa para conseguir la textura perfecta y un interior cremoso. Una vez lista, solo queda darles forma y freírlas hasta obtener croquetas doradas y crujientes, listas para servir como entrante, aperitivo o tapa en cualquier ocasión.
Ingredientes
- 6 u 8 butifarrones
- 500 ml de leche
- 90 gr de harina
- 25 gr de mantequilla
- 1 cebolla
- 2 huevos
- Pan rayado
- Aceite
Como hacer croquetas de butifarrón
- Pelamos y cortamos en trocitos muy pequeños la cebolla, la ponemos a sofreír en una sartén al fuego con un poco de aceite.
- Mientras, pelamos los butifarrones, los cortamos y los picamos en una picadora eléctrica.
- Cuando la cebolla esté bien pochada añadimos los butifarrones picados, mezclamos bien y reservamos.
- En un cazo ponemos a calentar la mantequilla, cuando esté derretida agregamos la harina y dejamos que se dore un poco.
- Seguidamente vertemos la leche poco a poco sin dejar de remover para que no se formen grumos. Cuando empiece a espesar añadimos la mezcla de butifarrón con cebolla y seguimos removiendo hasta que quede bien espeso, la masa se tiene que despegar del cazo.
- Seguidamente lo sacamos del fuego, ponemos la masa en una bandeja y dejamos que se enfríe. Cuanto más fría esta la masa más manejable será.
- Con la masa ya fría y con la ayuda de una cuchara vamos cogiendo porciones de masa y con las manos le damos la forma deseada. Las pasamos por harina, huevo batido y pan rallado; en ese preciso orden.
- En este punto podemos guardar las croquetas y congelaras para otro día o freírlas en abundante aceite.
- Cuando estén bien fritas las sacamos de la sartén y las ponemos en un plato con papel absorbente para eliminar el exceso de aceite.