En esta receta elaboramos unos caracoles a la mallorquina, un plato tradicional y muy arraigado en la historia y gastronomía de Mallorca. Los caracoles guisados destacan por su sabor intenso y por la riqueza de sus ingredientes, y se recomienda disfrutarlos acompañados de un buen alioli casero que potencia aún más su sabor.
Para preparar esta receta es fundamental el caldo aromático, que suele llevar hierbas como tomillo, mejorana y hierbabuena, que aportan un sabor profundo y característico. Se pueden usar caracoles congelados o, en el caso de los vivos, es necesario ‘engañarlos’, un proceso para que salgan de sus conchas y así facilitar su limpieza y cocinado. En nuestro canal de YouTube tienes un vídeo donde te enseñamos cómo hacerlo de forma fácil.
Es tradición en muchos pueblos de Mallorca comer caracoles el día 25 de abril, Sant Marc, ya que se dice que hacerlo trae buena salud y bienestar durante todo el año.
Ingredientes
- 4 kg de caracoles
- 1 manojo de hierbas aromáticas (tomillo, mejorana, hierbabuena)
- 1 guindilla
- 1 cebolla grande
- 2 tomates maduros rallados
- 300 g de costilleja de cerdo
- 150 g de panceta
- 2 huesos de jamón
- 3 patatas medianas
- Aceite de oliva virgen extra
- Sal
- Pimienta negra
- 1 cucharadita de pimentón dulce
Como hacer caracoles guisados a la mallorquina
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Purgar y limpiar los caracoles
El día anterior, coloca los caracoles vivos en un recipiente amplio con un poco de harina y algunas verduras (como hojas de lechuga o trozos de patata). Déjalos así durante toda la noche para que se alimenten y eliminen las impurezas internas. Al día siguiente, lávalos a fondo con varias aguas frías, cambiándolas hasta que queden completamente limpios y sin restos de tierra o baba.
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Primera cocción de los caracoles
Coloca los caracoles limpios en una olla grande con abundante agua fría. Ponla al fuego y, cuando empiece a hervir, escúrrelos.
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Cocer los caracoles con hierbas y guindilla
Vuelve a colocar los caracoles en la olla con agua limpia, añade un manojo de hierbas aromáticas, sal y una guindilla. Cuece a fuego medio durante aproximadamente una hora.
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Preparar el sofrito
En una cazuela grande con aceite de oliva, sofríe la cebolla bien picada a fuego medio hasta que empiece a dorarse.
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Incorporar el tomate y las carnes
Añade el tomate rallado, la costilleja de cerdo troceada, la panceta cortada en dados y los huesos de jamón. Remueve bien para que la carne se dore ligeramente y el tomate se integre con el sofrito. Cocina todo durante unos minutos hasta que los jugos se mezclen y la salsa tome color.
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Añadir las especias y el caldo
Agrega una pizca de sal, pimienta negra y el pimentón dulce. A continuación, incorpora tres cucharones del caldo donde han hervido los caracoles. Deja cocer a fuego suave unos 10 minutos para que los sabores se concentren.
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Incorporar los caracoles al guiso
Añade los caracoles cocidos junto con parte del caldo de su cocción al sofrito. La cantidad debe ser suficiente para cubrirlos. Mezcla con cuidado para que se impregnen y deja cocinar a fuego lento durante unos 30 minutos, removiendo de vez en cuando.
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Añadir las patatas y finalizar la cocción
Pela y corta las patatas en trozos medianos. Incorpóralas a la cazuela y cocina a fuego medio-bajo hasta que estén tiernas. Deja reposar los caracoles guisados a la mallorquina unos minutos antes de servir.