
En esta receta cocinamos pencas de acelgas rebozadas al ajillo y perejil, una forma deliciosa de aprovechar los tallos de la acelga, que muchas veces se desechan. Esta verdura tiene un alto contenido en fibra, calcio, magnesio y vitaminas A y C, por lo que es muy beneficiosa para la salud. Antes de rebozarlas, las pencas deben hervirse durante unos 10-15 minutos, hasta que estén tiernas.
Te enseñamos dos tipos de rebozados: uno con harina y otro con pan rallado. Ambas opciones pueden freírse, pero también puedes hacerlas al horno o en freidora de aire (airfryer) para una versión más light y baja en calorías. Además, si haces cantidad, puedes congelarlas sin problema una vez rebozadas.
Las pencas de acelga son muy versátiles: se pueden servir solas, acompañadas de una buena salsa casera, o como guarnición. ¡Una receta sencilla, económica y perfecta para dar una segunda vida a esta parte tan nutritiva de la acelga!
Ingredientes
- Pencas de acelga frescas
- Dientes de ajo
- Perejil fresco
- 1 huevo grande
- Harina de trigo
- Pan rallado
- Aceite de oliva virgen extra
- Sal marina
- Pimienta negra recién molida
Como cocinar pencas de acelgas
-
Limpiar y preparar las pencas
Separa las pencas del resto de la hoja y límpialas bien bajo agua fría. Con una puntilla o cuchillo pequeño retira los hilos fibrosos de la superficie para que queden tiernas al comer.
-
Hervir las pencas al punto
Coloca las pencas limpias en una olla con agua suficiente y una pizca de sal. Hierve hasta que estén tiernas pero firmes, al dente, conservando su textura.
-
Escurrir y secar las pencas
Retira las pencas del agua y colócalas sobre papel de cocina. Sécalas cuidadosamente para eliminar toda la humedad, evitando que el rebozado se despegue durante la fritura.
-
Salpimentar y reservar
Añade sal marina y pimienta negra al gusto sobre las pencas secas. Reserva mientras preparas el rebozado.
-
Mezclar huevo, ajo y perejil
Pica finamente los dientes de ajo y el perejil fresco. Bate el huevo y mezcla con el ajo y el perejil picados.
-
Elegir el tipo de rebozado
Puedes pasar las pencas primero por harina y luego por la mezcla de huevo con ajo y perejil, o bien pasarlas directamente por la mezcla de huevo y después por pan rallado si prefieres un rebozado más crujiente.
-
Freír las pencas rebozadas
Calienta abundante aceite de oliva virgen extra en una sartén. Cuando esté caliente, fríe las pencas rebozadas por ambos lados hasta que adquieran un color dorado y uniforme.
-
Escurrir y servir
Retira las pencas fritas y colócalas sobre un plato con papel absorbente para eliminar el exceso de aceite. Sirve inmediatamente.