En esta receta te enseñamos a elaborar un delicioso mousse de chocolate casero, un postre muy fácil y rápido de preparar con muy pocos ingredientes. Siguiendo paso a paso nuestra receta conseguirás un mousse muy esponjoso, con una textura ligera y un intenso sabor a chocolate. Se trata de una receta tradicional, elaborada con cacao y huevo, perfecta para los amantes del chocolate auténtico y los postres caseros.
Aunque lleva una pequeña cantidad de mantequilla para aportar cremosidad, este mousse se prepara sin nata, por lo que resulta una opción light y saludable dentro de los postres caseros. Es ideal para quienes buscan un dulce equilibrado, fácil de digerir, sin complicaciones y sin excesos, sin renunciar al sabor. Un postre elegante, sencillo, versátil y con ese toque casero que nunca falla, perfecto para disfrutar en cualquier ocasión especial o como capricho de diario.
Ingredientes
- 100 g de chocolate negro 85% cacao
- 50 g de mantequilla sin sal
- 4 huevos
- 50 g de azúcar
Como hacer mousse de chocolate casero
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Derretir el chocolate y la mantequilla
Trocea la tableta de chocolate y colócala en un bol resistente al calor junto con la mantequilla. Derrite ambos ingredientes al baño maría o en intervalos cortos de microondas (15-20 segundos), removiendo entre cada uno hasta obtener una mezcla lisa y brillante. Deja templar unos minutos para que no esté demasiado caliente al añadir las yemas.
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Separar las claras de las yemas
Separa las claras de las yemas con cuidado, asegurándote de que no caiga nada de yema en las claras. Coloca las claras en un bol limpio y seco, y las yemas en otro.
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Incorporar las yemas y parte del azúcar
Añade las yemas y la mitad del azúcar al bol con el chocolate y la mantequilla ya templados. Mezcla con unas varillas manuales o una espátula hasta que se integren bien y obtengas una crema homogénea y brillante. Deja que repose y termine de enfriarse a temperatura ambiente.
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Montar las claras a punto de nieve
Con unas varillas eléctricas, bate las claras a velocidad media hasta que empiecen a espumar. Agrega poco a poco el azúcar restante mientras sigues batiendo, hasta obtener un merengue firme, blanco y brillante, que forme picos al levantar las varillas.
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Unir la mezcla de chocolate con las claras montadas
Cuando la crema de chocolate esté completamente fría, incorpora una parte de las claras montadas y mezcla suavemente con movimientos envolventes para aligerar la textura. Añade el resto de las claras poco a poco, sin batir, siempre con movimientos envolventes de abajo hacia arriba hasta que la mezcla quede aireada y uniforme.
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Reposar el mousse en frío
Reparte el mousse en copas o vasos individuales. Cubre con film transparente y guarda en la nevera al menos 2 horas para que adquiera la textura firme y esponjosa.
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Decorar y servir
Antes de servir, puedes decorar la superficie con virutas de chocolate negro, cacao puro en polvo o incluso un poco de nata montada. Sirve bien frío.