Pudin de avellanas

Pudin de avellanas
Receta de pudin de avellanas

En esta receta preparamos un delicioso pudin de avellanas con ensaimada, un postre casero ideal para aprovechar esos restos de ensaimada que han quedado de días anteriores. Su textura suave y cremosa, junto al sabor tostado de las avellanas, convierte este budín en una opción perfecta para sorprender en casa sin complicarse demasiado. Es un dulce fácil de preparar, que se hornea al baño maría y se puede disfrutar tanto frío como a temperatura ambiente. Ideal como merienda o como broche final tras una comida especial.

Si no tienes ensaimadas, no te preocupes: esta receta también funciona muy bien con pan del día anterior, bollería similar o incluso galletas. El resultado siempre es un puding lleno de sabor y con un toque tradicional que recuerda a los postres de toda la vida. Acompáñalo con nata montada, helado o una salsa de chocolate para darle un plus irresistible.

Ingredientes

  • 6 huevos
  • 1 litro de leche entera
  • 2 ensaimadas (del día anterior)
  • 125 g de avellanas
  • 150 g de azúcar
  • Ralladura de una naranja
Para el caramelo:
  • 100 g de azúcar
  • 2 cucharadas de agua

Como hacer pudin de avellanas

  1. Preparar el caramelo

    En una sartén pequeña ponemos el azúcar con dos cucharadas de agua y dejamos que se derrita a fuego medio, hasta que adquiera un color dorado oscuro. Vertemos el caramelo inmediatamente en la base de un molde rectangular o redondo, inclinándolo para cubrir toda la superficie. Dejamos que enfríe mientras seguimos con la receta.

  2. Batir los huevos y el azúcar

    En un bol grande batimos los huevos con el azúcar hasta obtener una mezcla homogénea y espumosa.

  3. Calentar la leche con la ralladura y las avellanas

    En un cazo amplio ponemos la leche junto con la ralladura de naranja y las avellanas picadas o trituradas. Calentamos a fuego medio hasta que empiece a hervir, removiendo de vez en cuando para que la leche no se pegue ni se derrame.

  4. Incorporar las ensaimadas desmenuzadas

    Cuando la leche esté caliente, añadimos las ensaimadas troceadas y mezclamos bien para que se empapen y se deshagan parcialmente. Retiramos del fuego y dejamos reposar unos minutos para que la mezcla temple antes de añadir los huevos.

  5. Mezclar las preparaciones

    Vertemos poco a poco la mezcla templada de leche, avellanas y ensaimadas sobre los huevos batidos, removiendo constantemente con unas varillas manuales para que los huevos no cuajen.

  6. Verter en el molde caramelizado

    Colamos la mezcla (opcional, si se desea una textura más fina) y la vertemos en el molde que tenemos preparado con el caramelo ya solidificado.

  7. Hornear al baño maría

    Colocamos el molde dentro de una fuente o bandeja de horno con agua caliente, de manera que el agua llegue hasta la mitad del molde. Horneamos a 170 °C durante unos 45 minutos, o hasta que al pinchar con un palillo éste salga limpio.

  8. Enfriar y desmoldar

    Retiramos el pudin del horno y dejamos que se temple a temperatura ambiente antes de desmoldarlo. Luego lo refrigeramos al menos 4 horas (mejor de un día para otro) para que adquiera consistencia.

  9. Servir

    Desmoldamos el pudin de avellanas con cuidado, vertiendo el caramelo por encima. Servimos frío, decorado con unas avellanas troceadas o un poco de ralladura de naranja si se desea.

Recetas relacionadas