
Las yemas de Santa Teresa, también llamadas yemas de Ávila, son uno de los dulces más tradicionales de la repostería española y símbolo de la ciudad de Ávila. Se trata de un postre muy sencillo, hecho con ingredientes básicos como yema de huevo y azúcar. Esta receta es perfecta para aprovechar esas yemas de huevo que sobran al hacer otros postres, y además es una alternativa deliciosa y casera a las que se pueden comprar en tiendas o en pastelería, a un precio más económico.
Estas yemas fáciles de elaborar se caracterizan por su textura suave, su forma esférica y ese delicado rebozado en azúcar glas que las recubre. Una vez hechas, se conservan en la nevera y pueden durar entre 4 y 5 días en perfectas condiciones si se guardan bien en un recipiente cerrado.
Ingredientes
- 12 huevos
- 125 ml de agua
- 1 ramita de canela
- Piel de limón
- 180 gr de azúcar
- Azúcar glas
Como hacer yemas de Santa Teresa
- Separar las yemas de las claras.
- Batir las yemas.
- En un cazo al fuego poner el agua, la piel de limón, la ramita de canela y el azúcar.
- Cocer a fuego medio hasta conseguir el punto de bola.
- Retirar el cazo del fuego y verter poco a poco las yemas mientras batimos para que ligue la mezcla.
- Volver a poner el cazo al fuego, sin dejar de batir, hasta que la mezcla espese y se despegue de las paredes.
- Una vez la mezcla esta lista la ponemos en un recipiente limpio para que se enfríe completamente.
- Para hacer las bolas hay que coger un trozo de mezcla ya fría, rebozarla en azúcar glas y con las manos darle la forma esférica.
- Introducir la bola resultante en una capsula de papel y guardarla en la nevera hasta el momento de servir.